Las recientes reformas laborales han impactado de manera significativa al sector empresarial, sin que este haya recibido apoyos o beneficios por parte de los gobiernos locales o federales.
Ante la inminente aprobación de la ley federal del trabajo que busca reducir la jornada laboral, Roberto Quijano, abogado patronal, afirmó que dicha reforma tendrá poco o ningún efecto positivo.
Quijano explicó que, aunque la intención es que los empleados trabajen menos horas, es probable que los trabajadores busquen empleos adicionales para mantener o aumentar sus ingresos, muchas veces en el sector informal.
En los últimos años, se han incrementado desproporcionadamente los salarios mínimos, se han aumentado las vacaciones, se ha elevado el impuesto sobre la nómina y ahora se pretende reducir la jornada laboral; todas estas medidas afectan directamente al sector empresarial.
Además, señaló que las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MIPYMES) serán las más perjudicadas, al verse obligadas a contratar más personal, lo que incrementará sus costos operativos. A esto se suma el aumento de aranceles y la inestabilidad económica global, factores que afectan especialmente a la región fronteriza.
Finalmente, Quijano reiteró que estas acciones desalientan la inversión, ya que no consideran el impacto negativo ni ofrecen apoyos que fomenten la inversión y el empleo.
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